Para hacer más agradable y cómoda nuestra vida en los pueblos y ciudades que habitamos, nos hemos dotado de un conjunto de objetos que hemos llamado el mobiliario urbano: papeleras, soportes informativos, bancos, parques infantiles, marquesinas de transporte públicos, contenedores de separación de residuos, farolas, vitrinas, señalética variada...
Se llaman mobiliario urbano en contraposición al mobiliario doméstico, es decir los muebles de nuestra casa particular: mesas, sillas, muebles, estanterias... Mencionamos esto, porque el mobiliario urbano es consecuentemente público, pagado por todas y todos, y para el disfrute y servicio de todos y todas.
Sin embargo, como sabemos nuestra relación con este material está lejos de ser idílica a pesar de las cosas que nos aportan: Pintados, quemados, arrancados, rotos, robados... los ciudadan@s españoles perdemos millones de euros cada año en la reparación de estos bienes comunes.
En este taller, que llevamos a tu centro, analizamos participativamente y de forma amena la importancia social de este mobiliario, en cuanto a sus funciones y coste económico, poniendo el acento en qué podríamos hacer con el dinero que nos ahorraríamos de cuidar estos materiales, y el impacto ambiental de elaboración de los mismos, con ejemplos reales.
Pero sobretodo generamos una dinámica en la que exploramos ideas para expresarnos, decir lo nuestro, divertirnos, pero de forma constructiva, sin necesidad de arremeter contra lo que también es nuestro.
Este es un taller dirigido para l@s jóvenes de los municipios y que se realiza en colaboración con los ayuntamientos, como medida de apoyo a sus planes de trabajo y desarrollo con la juventud.